Salí de la ducha . . . . . .
me miré al espejo
y pensé en voz alta:
- ¡Qué bueno sería tener unas tetas más gordas!
Mi marido que lo oyó, en lugar de decir:
- ¡No es verdad!, -como dice normalmente-
Me dijo:
- Si quieres que te crezcan, debes pasarte un trozo de papel higiénico entre las tetas durante algunos minutos.
Me dijo:
- Si quieres que te crezcan, debes pasarte un trozo de papel higiénico entre las tetas durante algunos minutos.
Con muchas dudas, pero decidida a probar todo, tomé un trozo de papel higiénico y me lo pasé entre los pechos durante algunos minutos.
Después le pregunté:
- ¿Durante cuanto tiempo lo tengo que hacer?
Y él me contestó:
- Tienes que hacerlo todos los días durante varios años.
Le dije:
-¿Tú estas seguro de que me crecerán pasándome un trozo de papel higiénico todos los días durante varios años?
Y él me respondió:
- Si te ha funcionado con el culo, ¿por qué no te va a funcionar con las tetas?